Presoterapia en casa, bien utilizada, puede transformar tu recuperación diaria. Si buscas aliviar piernas cansadas, favorecer el drenaje linfático o acelerar la recuperación tras el ejercicio, aquí encontrarás qué es, cómo usarla paso a paso y qué beneficios reales puedes esperar en 2025, con pautas seguras y basadas en evidencia.
En breve
- La presoterapia es compresión neumática intermitente mediante botas o manguitos que mejoran retorno venoso y linfático.
- Sesiones orientativas: 20–45 minutos, 3–5 veces por semana; presión inicial moderada (30–60 mmHg) y progresiva según tolerancia.
- Beneficios habituales: piernas más ligeras, menor hinchazón, recuperación muscular más rápida y sensación de descanso.
- Evita su uso con trombosis venosa activa, infecciones o insuficiencia cardíaca descompensada; consulta si estás embarazada o tienes patología vascular.
- Para maximizar resultados: hidrátate, eleva las piernas, combina con movilidad suave y hábitos de sueño.
Qué es la presoterapia y cómo funciona
La presoterapia (compresión neumática intermitente) utiliza cámaras de aire que se inflan y desinflan de forma secuencial para aplicar presión controlada en piernas, brazos o cintura. Este masaje mecánico impulsa la sangre y la linfa hacia el tronco, ayudando a reducir la estasis y a movilizar líquidos.
- Mecanismo clave: compresión secuencial distal→proximal que favorece el retorno venoso y linfático.
- Parámetros comunes en domicilio: 30–60 mmHg para uso general; algunos equipos permiten rangos mayores, siempre adaptados a la tolerancia y a las recomendaciones clínicas. Fuente general sobre IPC y rangos: StatPearls/NCBI.
- Uso histórico: en clínica se emplea para linfedema y prevención de trombosis; hoy su formato doméstico facilita rutinas de bienestar y recuperación. Ver panorama clínico en NHS y Cleveland Clinic.
Consejo rápido: piensa en la presoterapia como “una bomba externa” que impulsa fluidos: más retorno, menos estancamiento.
Beneficios esperables y qué dice la evidencia
Aunque los resultados varían según objetivo y constancia, estos son los beneficios más reportados:
- Piernas ligeras y menos hinchazón: la compresión secuencial ayuda a evacuar líquido intersticial y linfa, parte del manejo estándar del linfedema según consenso ISL 2020 (International Society of Lymphology).
- Recuperación tras ejercicio: diversos estudios muestran mejoras en percepción de dolor y fatiga y reducción de la sensación de rigidez post-entreno tras sesiones de compresión neumática, especialmente cuando se aplica en las primeras horas posteriores. Revisión de usos y seguridad en StatPearls.
- Circulación y descanso: usuarios frecuentes refieren mejor descanso nocturno al reducir la pesadez vespertina de piernas; el dispositivo se utiliza desde hace años en clínica para mejorar el retorno venoso (Cleveland Clinic).
- Complemento en el manejo de retención de líquidos de origen no médico: como apoyo de hábitos saludables (movilidad, hidratación, elevación de piernas). Ver pautas generales en NHS.
Importante: no sustituye tratamientos médicos ni “cura” varices o celulitis, aunque puede mejorar el confort y el aspecto derivado de la hinchazón. Si tienes diagnóstico vascular, pide orientación a tu profesional de salud.
Seguridad: contraindicaciones, precauciones y señales de alarma
La presoterapia en casa es generalmente segura cuando se usa con sentido común. Aun así, hay casos en los que debes evitarla o consultar antes:
- Evita su uso: trombosis venosa profunda (TVP) activa o reciente, embolia pulmonar, insuficiencia cardíaca descompensada, infecciones cutáneas, heridas abiertas en la zona, dolor intenso no explicado, neuropatía severa con pérdida de sensibilidad.
- Precaución/consulta: embarazo, hipertensión no controlada, linfedema en estadio avanzado, enfermedad arterial periférica, prótesis o cirugías recientes. Guías clínicas y panorama de indicaciones/contraindicaciones: NHS y StatPearls.
- Si presentas signos de trombosis (dolor, calor, enrojecimiento, aumento súbito de volumen en una pierna), suspende y consulta de inmediato. Información general: CDC – Coágulos de sangre.
Norma de oro: si hay duda médica, consulta primero; si duele o adormece, baja presión o detén la sesión.
Cómo elegir un equipo de presoterapia para el hogar
Antes de comprar, valora estos criterios prácticos:
- Ajuste y tallas: botas que cubran del pie al muslo si buscas drenaje completo de piernas; manguitos extra para zona de cadera si acumulas líquido ahí.
- Rango de presión y programas: ideal con control de 20–120 mmHg, varios modos secuenciales y opción de desactivar cámaras si hay zonas sensibles.
- Ciclo y duración: temporizador (15–60 min), indicación clara de ciclos y pantalla fácil de leer.
- Ruido y portabilidad: equipos silenciosos y compactos facilitan la adherencia.
- Materiales y limpieza: interior resistente, fácil de desinfectar; tubos y cremalleras robustos.
- Seguridad y garantía: certificaciones (p. ej., CE), manual con contraindicaciones y garantía sólida.
- Soporte y servicio: disponibilidad de repuestos, atención posventa, guías de uso.
Guía paso a paso: tu primera sesión en casa
- Preparación
- Hidrátate y vacía vejiga. Quita prendas apretadas; piel limpia y seca.
- Siéntate o recuéstate con piernas ligeramente elevadas.
- Colocación y ajuste
- Ponte las botas desde el pie hacia arriba asegurando un cierre uniforme (ni holgado ni excesivo).
- Evita pliegues en la tela para no crear puntos de presión.
- Parámetros de inicio
- Programa de compresión secuencial suave; presión inicial 30–40 mmHg.
- Duración 20–30 minutos. Observa sensaciones: debe ser firme, no dolorosa.
- Durante la sesión
- Respira con calma. Si notas hormigueo, entumecimiento o dolor, detén y baja presión.
- Después
- Quita las botas lentamente. Camina unos minutos o realiza movilidad suave de tobillos y caderas.
- Limpia el equipo según fabricante.
Progresión: aumenta presión 5–10 mmHg y/o 5–10 minutos por semana si lo toleras bien, hasta el rango objetivo.
Protocolos orientativos según objetivo
Título de la tabla: Parámetros orientativos de presoterapia en casa (ajusta a tu tolerancia y recomendaciones)
| Objetivo | Presión sugerida (mmHg) | Duración sesión | Frecuencia semanal | Zona recomendada | Observaciones |
|---|---|---|---|---|---|
| Piernas cansadas/hinchazón | 30–50 | 25–40 min | 3–5 | Pie→muslo | Eleva piernas 10–15° |
| Recuperación post-entreno | 40–60 | 20–30 min | 3–6 (según carga) | Pie→muslo | Ideal dentro de las 2–3 h tras el ejercicio |
| Bienestar y descanso | 30–45 | 20–30 min | 3–5 | Pie→muslo | Sesiones vespertinas favorecen relajación |
| Retención de líquidos leve | 35–55 | 30–45 min | 4–6 | Pie→muslo y/o cadera | Combina con movilidad y hidratación |
| Sedentarismo/teletrabajo | 30–45 | 20–25 min | 3–5 | Pie→muslo | Pausas activas cada 60–90 min |
Referencias generales de uso y seguridad: NHS, Cleveland Clinic, StatPearls.
Errores comunes y cómo evitarlos
- Subir demasiada presión desde el primer día: prioriza constancia sobre intensidad.
- Sesiones excesivamente largas: más no siempre es mejor; respeta descansos.
- Usar con contraindicaciones: revisa tu estado de salud y el manual.
- Mala colocación: pliegues o cierres irregulares crean puntos de presión incómodos.
- Olvidar lo básico: hidrátate, muévete y duerme bien; la presoterapia multiplica, no reemplaza, hábitos.
Combina la presoterapia con hábitos que potencian resultados
- Movilidad y estiramientos suaves: bombas de tobillo, flexo-extensión de rodilla y cadera.
- Hidratación y nutrición: favorecen el balance de fluidos.
- Elevación de piernas 10–15° tras la sesión para prolongar el efecto.
- Tecnologías complementarias de recuperación (luz roja, masaje percutivo, rutinas de sueño) integradas en tu día a día con un enfoque de bienestar global como propone KUMO.
Para más fundamentos clínicos del manejo del linfedema y la compresión, consulta el documento de consenso de la ISL (2020): International Society of Lymphology y la guía de fisioterapia para linfedema de la APTA.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Cuánto tarda en notarse la mejoría con presoterapia en casa?
Muchas personas perciben piernas más ligeras y menos tensión desde la primera semana, especialmente si hacen 3–5 sesiones de 20–30 minutos. Para objetivos como reducción de hinchazón leve o confort post-entreno, la mejoría suele consolidarse tras 2–4 semanas de uso consistente. Si el objetivo es apoyar el manejo de linfedema, la presoterapia es un complemento a un plan integral y los tiempos dependen del estadio y de la adherencia a medidas como vendaje, ejercicio y cuidado de la piel. Referencias de uso clínico: NHS.
¿Es seguro usarla todos los días?
Sí, en personas sanas y sin contraindicaciones, puede usarse a diario con presiones moderadas y escuchando las sensaciones del cuerpo. Alternar días o variar intensidades también funciona bien. Si tienes patologías cardiovasculares, linfáticas o estás embarazada, consulta antes. Interrumpe si aparecen dolor, entumecimiento o cambios de coloración. Recomendaciones generales y seguridad descritas en Cleveland Clinic y StatPearls.
¿La presoterapia ayuda con las varices?
La presoterapia puede mejorar síntomas asociados como pesadez, hinchazón o cansancio al favorecer el retorno venoso, pero no corrige la anatomía de una vena varicosa. Es un apoyo de confort y bienestar, no un sustituto de tratamientos médicos (p. ej., escleroterapia, láser). Si tienes insuficiencia venosa diagnosticada, pide a tu angiólogo/flebólogo que ajuste parámetros y valore su idoneidad en tu caso. Visión general del retorno venoso y compresión en Cleveland Clinic.
¿Presoterapia y linfedema: qué debo saber?
En linfedema, la compresión neumática es una herramienta complementaria dentro de un plan que incluye terapia descongestiva compleja, prendas de compresión, ejercicio y cuidado cutáneo. El consenso ISL (2020) la reconoce como parte del abordaje en determinados casos, siempre individualizada y supervisada cuando sea posible. Empieza con presiones bajas, controla el volumen y vigila la piel. Documento ISL: International Society of Lymphology y guía APTA.
¿Mejor antes o después del entrenamiento?
Para recuperación, suele ser útil en la ventana de 1–3 horas post-ejercicio para aliviar rigidez y sensación de fatiga. Si tu sesión es muy intensa o con mucha excéntrica, puedes repetir una sesión más suave al final del día. Antes del ejercicio, una compresión ligera y breve puede “despertar” la circulación, pero la prioridad pre-entreno es el calentamiento activo. Orientaciones generales de recuperación en StatPearls.
Para recordar
- La presoterapia en casa moviliza fluidos y mejora el retorno, aliviando pesadez e hinchazón.
- Empieza con 30–40 mmHg durante 20–30 minutos y progresa según tolerancia.
- Evita su uso si hay TVP activa, infecciones o insuficiencia cardíaca descompensada.
- Consolida hábitos: movilidad, hidratación, elevación de piernas y buen sueño.
- Úsala 3–5 veces por semana para resultados consistentes; a diario si te sienta bien y no hay contraindicaciones.
- ¿Quieres integrar la recuperación en tu rutina de 2025? Descubre cómo hacerlo con el enfoque de bienestar de KUMO.













