Drenaje linfático y presoterapia se potencian cuando se hacen bien. En esta guía práctica aprenderás a combinarlos con seguridad: orden de aplicación, tiempos, frecuencia, señales a vigilar y escenarios reales (deporte, piernas pesadas o bienestar), con apoyo en fuentes clínicas y recomendaciones prudentes.
El objetivo es claro: ayudarte a diseñar una rutina eficaz para estimular el sistema linfático, reducir la sensación de pesadez y favorecer la recuperación, sin sustituir la valoración de un profesional de la salud. Si buscas integrar tecnología de compresión en tu autocuidado, aquí tienes un plan realista y fácil de seguir.
En breve
- Haz primero un masaje de drenaje suave y después la presoterapia para “abrir” vías y luego impulsar el retorno.
- Sesiones típicas: 10–20 min de masaje + 20–45 min de compresión neumática, 2–4 veces/semana, según tolerancia.
- Presión e intensidad moderadas, progresando poco a poco y priorizando comodidad.
- Evita si hay trombosis venosa, infección aguda, insuficiencia cardiaca descompensada o dudas médicas.
- Hidrátate, respira profundo y observa tu cuerpo: la comodidad manda.
Qué es cada técnica y cómo actúan
Drenaje linfático manual: estímulo suave del sistema linfático
El drenaje linfático manual (DLM) es un masaje muy ligero y rítmico que busca favorecer el movimiento de la linfa hacia ganglios y zonas de evacuación. Se usa en protocolos clínicos de descongestión y también con fines de bienestar para aliviar sensación de hinchazón o piernas cansadas. Su base es la anatomía del sistema linfático y maniobras que respetan trayectos y dirección del flujo.
- Guía práctica de DLM para autocuidado en contextos clínicos: Memorial Sloan Kettering
- Conceptos del sistema linfático: Instituto Nacional del Cáncer (NCI)
Presoterapia o compresión neumática intermitente: “empuje” secuencial
La presoterapia utiliza botas o mangas que se inflan y desinflan en secuencias para promover el retorno venoso y linfático. En clínica se conoce como compresión neumática intermitente (IPC) y se usa como complemento en linfedema o insuficiencia venosa, y cada vez más en rutinas de recuperación y bienestar.
- Qué es y cómo se usa un dispositivo de compresión neumática: Cleveland Clinic
- Tratamiento del linfedema y papel de la compresión: NHS (Reino Unido)
Por qué combinarlos de forma segura
Usar primero un masaje de drenaje suave puede “preparar” vías y activar ganglios, y la presoterapia posterior aporta un estímulo mecánico más global y constante. En conjunto, muchas personas refieren:
- Menos sensación de pesadez y tensión en las piernas tras días largos o viajes.
- Recuperación subjetiva más rápida tras esfuerzos ligeros a moderados.
- Relajación y mejor descanso por el efecto parasimpático del toque suave.
En el ámbito clínico, documentos de consenso recomiendan la terapia descongestiva compleja (DLM, vendaje/compresión, ejercicio y cuidado de la piel) para el linfedema, ajustada por profesionales (Consenso ISL, 2020) PubMed. Para uso doméstico orientado al bienestar, la combinación debe ser moderada y guiada por comodidad, y nunca sustituir indicaciones médicas.
Consejo rápido: respira de forma diafragmática 3–5 minutos antes de empezar. La “bomba” respiratoria es uno de los motores más potentes del retorno linfático.
Cómo combinarlos: orden, tiempos e intensidad
Orden recomendado de una sesión
- Preparación (2–3 min): respiración diafragmática y movilidad suave de cuello y hombros.
- Drenaje linfático suave (10–20 min): maniobras ligeras hacia ganglios clave (ingle/axila), sin dolor.
- Presoterapia (20–45 min): programa secuencial confortable, empezando con intensidades bajas-medias.
- Recuperación (2–3 min): elevación de piernas y agua en pequeños sorbos.
Referencia clínica para duraciones de IPC en domicilio: 30–60 min por sesión en planes médicos específicos, según Cleveland Clinic. Ajusta a tu objetivo de bienestar y tolerancia.
Duración, presión e intensidad
- Duración total sugerida: 30–60 min.
- Intensidad/Presión: prioriza comodidad; evita molestias, adormecimiento o marcas duraderas.
- Programas: secuencial o peristáltico, con progresión gradual semana a semana.
La intensidad óptima varía según dispositivo y persona. Sigue siempre el manual del fabricante y, si hay condición médica, la pauta de tu fisioterapeuta o médico.
Frecuencia semanal y progresión
- Inicio: 2 sesiones/semana durante 2–3 semanas.
- Mantenimiento: 2–4 sesiones/semana según efecto percibido.
- Señal de progreso: piernas más ligeras, sin signos de irritación ni molestia residual.
Señales de alerta
Detén la sesión y consulta si aparecen dolor agudo, enrojecimiento marcado, aumento de hinchazón unilateral, falta de aire, fiebre o entumecimiento persistente. En contexto clínico, sigue la guía del equipo de salud: NHS – Tratamiento del linfedema.
Plan orientativo para una semana
Título: Plan semanal para combinar drenaje linfático y presoterapia (bienestar general)
| Día | Objetivo | Técnica | Duración | Intensidad | Notas |
|---|---|---|---|---|---|
| Lunes | Arranque suave | Drenaje + Presoterapia | 10–15’ + 20–30’ | Baja | Enfoca respiración y comodidad |
| Miércoles | Estímulo moderado | Drenaje + Presoterapia | 15–20’ + 30–40’ | Baja–media | Eleva piernas 5’ tras la sesión |
| Viernes | Recuperación semanal | Drenaje + Presoterapia | 15–20’ + 30–45’ | Media cómoda | Hidrátate y camina 10’ suave |
| Domingo | Opcional relajación | Solo Presoterapia o Drenaje | 20–30’ | Baja | Ajusta según cómo te sientas |
Nota: Es un ejemplo general para bienestar. En casos médicos (p. ej., linfedema), el plan lo define un profesional según el consenso ISL 2020 PubMed.
Casos de uso: deporte, trabajo y viajes
Recuperación tras actividad física ligera-moderada
Después de sesiones de carrera suave, ciclismo indoor o fuerza moderada, la combinación puede ayudar a disminuir la sensación de rigidez y favorecer el descanso. Evita intensidades altas si hay daño muscular significativo; prioriza comodidad y respiración.
Oficina, teletrabajo y viajes largos
Si pasas muchas horas sentado o de pie, alterna días con sesiones cortas. Elevar las piernas y caminar brevemente potencia el efecto. Información general sobre el sistema linfático para entender por qué el movimiento ayuda: NCI – Sistema linfático.
Postoperatorio y linfedema: consulta siempre
En linfedema o postcirugía, la terapia descongestiva compleja y la compresión están protocolizadas y deben individualizarse por el equipo clínico (ISL 2020) PubMed. Recursos fiables: NHS – Tratamiento y revisión Cochrane sobre DLM en linfedema asociado a cáncer de mama (
Contraindicaciones y seguridad
Evita presoterapia y masaje de drenaje en caso de:
- Trombosis venosa profunda o sospecha de TVP.
- Infección cutánea activa (celulitis), heridas no cicatrizadas.
- Insuficiencia cardiaca descompensada o edema de causa cardíaca no controlada.
- Cáncer activo sin autorización médica en la zona tratada.
- Embarazo: consulta antes de usar dispositivos en miembros inferiores.
Guías y visión general de seguridad: Cleveland Clinic – Dispositivo de compresión y MedlinePlus – Linfedema.
Evidencia y límites actuales
- El DLM forma parte de la terapia descongestiva compleja; el consenso ISL 2020 lo respalda como componente de un enfoque combinado (compresión, ejercicio, cuidado de piel) PubMed.
- Una revisión Cochrane (2015) sugiere que el DLM puede aportar beneficio adicional en algunos casos clínicos, aunque la evidencia es heterogénea y depende del contexto Cochrane Library.
- La IPC tiene uso establecido en linfedema y patología venosa bajo indicación profesional NHS, y su adopción para bienestar y recuperación percibida va en aumento, si bien la evidencia en rendimiento deportivo sigue evolucionando.
- Para uso doméstico, la regla es prudencia, comodidad y progresión, con consulta profesional si hay condiciones médicas.
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Preguntas frecuentes
¿Es mejor hacer primero presoterapia o drenaje linfático?
Para la mayoría de personas sin patología, resulta lógico empezar con un drenaje suave y terminar con presoterapia. El masaje ligero puede “despejar” rutas y activar ganglios, y la compresión secuencial aporta luego un estímulo sostenido que favorece el retorno. En entornos clínicos, la secuencia forma parte de protocolos más amplios y se individualiza. Si tienes una condición médica (p. ej., linfedema), sigue la pauta de tu fisioterapeuta o médico y las recomendaciones de seguridad de fuentes como NHS.
¿Cuántas sesiones a la semana son adecuadas?
Como referencia de bienestar, 2–4 sesiones semanales funcionan para muchas personas. Empieza con 2 sesiones, evalúa sensaciones (ligereza, calidad del sueño, ausencia de molestias) y ajusta. En contextos médicos, hay pautas más específicas que pueden llegar a 30–60 minutos de IPC por sesión, una o dos veces al día, según Cleveland Clinic, siempre bajo indicación profesional. La progresión debe ser gradual y orientada por la comodidad.
¿Qué presión usar en las botas de presoterapia?
No existe una “presión universal”. Depende del dispositivo, tu tolerancia y tu objetivo. Para bienestar general, empieza con programas de baja a media intensidad que resulten confortables, sin dolor ni entumecimiento. Sigue el manual del fabricante y evita superar niveles que dejen marcas persistentes. Si tienes problemas vasculares o linfáticos, consulta antes y ajusta la presión bajo supervisión profesional. Recurso general sobre seguridad y uso: Cleveland Clinic.
¿Puedo entrenar el mismo día que hago presoterapia y drenaje?
Sí, pero organiza el horario. Muchas personas prefieren realizar la combinación tras el ejercicio para favorecer la relajación y la sensación de piernas ligeras. Si lo haces antes, mantén intensidades bajas para no “adormecer” el tejido previo al entrenamiento. Observa tu respuesta al día siguiente y ajusta duración/intensidad. Hidratarte y caminar suave después de la sesión ayuda a consolidar el efecto.
¿Quién no debería usar presoterapia o drenaje linfático?
Evita estas técnicas si tienes trombosis venosa profunda, infección aguda, insuficiencia cardiaca descompensada o heridas abiertas. En embarazo o cáncer activo, pide autorización médica. Ante dolor, enrojecimiento marcado o empeoramiento de la hinchazón, detén el uso y consulta. Para entender el abordaje clínico del linfedema y el papel de la compresión, revisa las guías del NHS y el consenso ISL 2020 PubMed.
Lo esencial
- Primero drenaje suave; después presoterapia con intensidad confortable.
- 30–60 minutos totales por sesión, 2–4 veces/semana, progresando despacio.
- Señales de éxito: menos pesadez, mejor descanso, sin molestias al día siguiente.
- Prioriza seguridad: conoce las contraindicaciones y consulta si tienes dudas.
- Integra respiración, hidratación y caminatas cortas para potenciar el efecto.
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